Análisis técnico, ¿Qué significa? Cualquiera que empiece a interesarse por el mundo del trading y el mercado de capitales se topará rápidamente con el término “análisis técnico”. Al principio es un poco difícil de entender su utilidad, y por eso comenzaremos con la definición de Wikipedia:
El análisis técnico es un método de inspección y reconocimiento de las tendencias del precio de los distintos activos financieros negociados en el mercado, a nivel del activo específico o incluso de un grupo de ellos del mismo tipo. Las personas que se dedican al análisis técnicos se denominan “cirujanos técnicos” o “técnicos” para abreviar. El analista técnico traza los precios de los activos que analiza en gráficos, para identificar tendencias y patrones que permitan predecir futuros movimientos del mercado. Wikipedia.
Trate de concentrarse por un momento en esta frase: “Identificar tendencias y patrones”. Y si es posible afinar aún más, pondremos el foco en la palabra “patrones”.
Le sugerimos que interprete el término análisis técnico como patrones de comportamiento. ¿Por qué? Por la misma razón, que el análisis técnico y sus principios (según la teoría de Dow hay 6 principios fundamentales) han funcionado y se han estado utilizando durante décadas sin sufrir modificación alguna.
Pero un segundo, ¿Cómo puede ser que los mismos conceptos que funcionaban hace 100 años sigan siendo relevantes hoy en día? Después de todo, el mundo ha avanzado significativamente, la tecnología, la globalización, internet, son conceptos que han introducido muchos cambios en el mundo del trading y la inversión y, sin embargo, el análisis técnico ha permanecido inmutable, ¿Por qué?
Porque cuando hacemos el análisis técnico de un valor concreto, no analizamos a la empresa en sí, ni sus estados financieros, ni mucho menos los balances, sino tan solo el gráfico que ha dejado su precio, y a veces sucede que los traders compran o venden una acción sin ni siquiera saber a qué se dedica la empresa. Y todo eso ocurre “gracias” al análisis técnico.
Por tanto, podemos intentar conjeturar una definición para el análisis técnico, que se trata de la relación probada en el pasado entre la alegría obtenida en los beneficios, que es tres veces menor respecto de la tristeza resultante en caso de pérdida. Es decir, si usted terminara un día de negociación con una ganancia de 500 $ y eso le reportara una alegría X, si cerrara con la misma pérdida (500 $) obtendría una tristeza del triple, o sea 3X. Así pues, una vez comprendemos que el precio de las acciones se mueve debido a la oferta y la demanda de los inversores, podemos tratar (y pongamos el énfasis en la palabra tratar) de realizar el análisis técnico de un gráfico, comprendiendo que los patrones de comportamiento que siguen los traders en su operativa están realmente contenidos en el mismo gráfico.
Practicando análisis técnico, podrá observar como los operadores han tomado una decisión basándose únicamente en los patrones de acción de la mayoría de la gente, así que podemos determinar que existen dos tipos de traders, el trader A y el B. El primero ha decidido comprar el valor Y, el precio de la acción de dicho valor es de 100 $. Tras ejecutar la compra, el precio de Y desciende hasta los 50 $, por lo que el trader A está molesto, dolido y nervioso. Está perdiendo el 50% de su inversión y para volver a su precio de entrada el valor de la acción tendría que subir un 100%, por lo que decide que de momento no quiere vender, puesto que la pérdida que ahora mismo asume es tan solo “sobre el papel”, y no se convertirá en real mientras no venda, así pues, no hace ningún movimiento con la esperanza de que ocurra lo mejor.
Por su parte, el trader B examina el valor Y, observa que hace poco cotizaba a 100 $, y estima que subirá de nuevo a ese precio, por lo que decide comprar al precio actual.
Después de 3 meses de espera, el precio de la acción Y vuelve a ser de 100 $, así pues el trader A, que en su momento no vendió, está muy contento por haber tomado la decisión correcta y ahora que ya no tiene pérdidas decide venderla, de manera que aunque no obtendrá beneficio, tampoco tendrá pérdidas, y menos aún una del 50%.
A su vez, ahora que la acción Y ha efectuado un movimiento alcista importante, alcanzando un precio de 100 $, el trader B piensa para sí mismo que las personas que han invertido en Y en el pasado probablemente aprovecharán la situación para salir de ella, por tanto, si él vende obtendrá un beneficio del 100%.
Un nuevo personaje entra en escena, el trader C. Es un experto operador y sabe que hay muchos traders A y B por el mundo, por lo que estima que la acción Y probablemente caiga en picado debido a las numerosas ventas de estos traders y, por tanto, decide realizar una operación en corto. Y he aquí, que tres personas diferentes, todas ellas movidas por distintas emociones y estados de ánimo, avaricia, miedo, etc., toman una decisión basándose en el gráfico del valor, que es señores, puramente el paradigma del análisis técnico.
Por cierto, ahondando en el ejemplo anterior y para exponer aún más su extremismo, téngase en cuenta que ninguno de los tres operadores sabe a qué se dedica la empresa.
Finalmente, establecemos que el análisis técnico trata de predecir el próximo movimiento del precio de un valor por medio de su gráfica. Por lo que la próxima vez que usted mire el gráfico de una acción, trate de ponerse en el lugar de los otros operadores, intente averiguar en qué punto del gráfico los traders A y B decidirán vender, para en ese caso, usted actuar como el tercer trader del ejemplo.
Sin duda, hay múltiples ejemplos y formas de realizar un análisis técnico, pero en este queda suficientemente ilustrada la idea general. Es importante tener en cuenta que las decisiones que tomemos aplicando análisis técnico no siempre darán sus frutos, al fin y al cabo, si fuera tan fácil, todo el mundo lo ejecutaría a la perfección.
Nos vemos en el próximo artículo.